Chevrolet Groove, la manejamos: la camioneta que quiere llevar a miles de primeros clientes al mundo de los SUV Mau Juárez
Chevrolet en México está aprovechando cada una de las oportunidades que Ford y Dodge han dejado ir al ya casi no contar con productos de acceso en México. A Aveo, Cavalier y Captiva se les suma la nueva Chevrolet Groove, otro producto que llega gracias a la colaboración con armadoras chinas y que se posiciona como el verdadero acceso a la gama de los SUV para la marca estadounidense. Viajamos a Oaxaca para conocerlo y a continuación te contamos nuestras primeras impresiones.
En video
Una cara fresca que no luce tan asiática
En ocasiones los productos provenientes de China cuentan con un diseño muy característico que de inmediato se delata como algo desarrollado en Asía, algo que puedes notar fácilmente con Captiva. En el caso de Groove y a pesar de no modificar mucho sobre la estética del Baojun 510, se nota un diseño algo más global que termina por refrenarse gracias a los cambios en parrilla y fascia que buscan aproximar su apariencia a la de los modelos realmente estadounidenses.
A lo largo de la gama de Groove nos encontraremos con dos versiones en general y tres niveles de precio. Al menos en la variante Premier que manejamos nos llevamos equipo como faros y calaveras LED, techo panorámico, rines de 16” y algunos contrastes de color en negro o plata para delinear su contorno.
Con una talla de 4.2 metros de largo se coloca como un producto de buenas dimensiones, pero sin caer en los límites de Tracker o Creta, por ejemplo. El diseño cuadrado y una buena distancia entre ejes le ha permitido dar un espacio amplio en cabina, pero de eso hablaremos un poco más adelante.
Amplitud y el equipo necesario
Por dentro Chevrolet Groove se muestra como un producto bien enfocado a atraer clientes nuevos o primerizos al mundo de los SUV/crossover. En términos de calidad y materiales encontramos una percepción colocada en la media, con un dominio claro de materiales duros que se acompañan en ciertas zonas con otros en piel sintética con algunos contrastes de color. Definitivamente no es el referente en calidad y percepción al interior, pero tampoco peca de descuidar muchos elementos. Eso sí, algunos ajustes podrían mejorar ya que aún con poco kilometraje notamos algunos rechinidos en los postes traseros.
Hablando de equipo, la marca la configuró con todo lo necesario para el ritmo de vida actual. El protagonismo queda en la pantalla táctil de 8” compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Esta pantalla está bien posicionada para que sea fácil verla, pero su interfaz y accionamiento a veces no son los más fluidos que hayamos visto. Los demás elementos que encontraremos son A/C automático de una zona, botón de modo ECO, puerto USB, techo panorámico, cristales y espejos eléctricos, sistema de audio con 6 bocinas y un cuadro de instrumentos análogo con una computadora de viajes monocromática con una fuente algo peculiar que no termina de combinar con el resto de las tipografías en el interior.
Otros elementos a destacar con el espejo de día y noche manual, además de asientos en piel sintética para la variante más completa y ajuste eléctrico para elevar y recorrer la posición, mas no para reclinar el asiento. También hay que decir que el volante tiene ajuste de altura, pero no de profundidad lo que a veces hace que nuestra posición de manejo no sea la que más cómodos nos haga sentir.
El espacio en la parte trasera aprovecha perfectamente sus formas cuadradas para llevar cómodamente a dos personas o con un poco menos de espacio a tres. El espacio de piernas es correcto y la posición es cómoda. En cuanto a cajuela, gracias a sus 318 litros puedes acomodar varios objetos voluminosos, aunque no es tan amplia como lo que verías en otros modelos de este segmento.
Desarrollada para las ciudades
Nuestra ruta de manejo estuvo compuesta por poco más de 120 km en las carreteras de Huatulco, Oaxaca a una altitud muy cercana al nivel del mar. Este factor ayudó bastante a su motor atmosférico de 1.5 litros con 110 hp y 108 lb-pie de par que lleva el poder al eje delantero gracias a una transmisión CVT —también está disponible una manual de 6 cambios en el modelo de acceso—.
La mayor parte de la ruta se llevó a cabo en carretera dejándonos ver que su reacción es algo suave, aún hundiendo el pie en el acelerador tiende a tardar un poco en encontrar el punto necesario para despegar con más poder. Por ello será importante tener bien claro cuando hacer un rebase y tener buen espacio para poder completarlo.
Estos detalles dejan claro que su desarrollo se hizo pensado en una movilidad dentro de las ciudades, más que en carretera. En esos términos la buena entrega de par a un rango bajo de revoluciones y la programación enfocada al ahorro de su caja demuestran lo anterior.
En términos de marcha la suspensión está bien calibrada para los terrenos accidentados de México, más allá de algo más de ruido filtrado a la cabina y algunas vibraciones, la marcha es cómoda y quita algo de preocupación en zonas de pavimento maltratado. La dirección sigue esta ruta con una sensación ligera que no transmite mucho. Definitivamente una configuración urbana.
Hablar de consumos en una prueba de este estilo es algo complejo ya que el ritmo de viaje tiende a ser acelerado y por lo tanto es difícil obtener una lectura más realista. Sin embargo, al llevar la camioneta algo forzara fue agradable ver un promedio de 11 km/l. Probablemente en ciudad esté aun rango similar y a ritmos más contenidos se pueda mejorar algo. Aunque para esos detalles ya tendremos más adelante una Groove para conocerla totalmente en ambiente urbano.
Justo al centro de un segmento extra reñido
Chevrolet Groove se coloca justo al centro de un grupo extremadamente reñido donde abundan ofertas con todo tipo de matices. Groove puede tener a favor el espacio en cabina que aprovecha sus formas cuadradas para sentirse amplia. También un manejo muy cómodo que nos ayuda en los lugares más accidentados de una ciudad. Sin embargo, en términos de conducción la caja CVT tiende a limitar sus capacidades.
En el interior la pantalla tiene detalles en fluidez y operación; también le resta un poco la falta de un par más de bolsas de aire en un segmento donde ya es norma tener seis. Finalmente el no contar con ajuste de profundidad en el volante y ciertos detalles en refinamiento hacen que no le sea tan fácil colocarse en una posición más cómoda.
En cuanto al mejor valor por versión probablemente la variante de acceso por $332,900 pueda tener algo más de sentido aún con caja manual. Sin embargo, hablando de las variantes LT CVT y Premier sea interesante checar si lo que ofrece Chevrolet Tracker se acopla a tus necesidades.
Ver galería completa » Chevrolet Groove: Primeras impresiones (53 fotos)
-
La noticia Chevrolet Groove, la manejamos: la camioneta que quiere llevar a miles de primeros clientes al mundo de los SUV fue publicada originalmente en Motorpasión México por Mau Juárez .
from Motorpasión México https://ift.tt/3puv1PS
via IFTTT
Comentarios
Publicar un comentario