Audi RS e-tron GT, al volante de un deportivo que emociona como montaña rusa Gerardo García
De entre los modelos más especiales que ha presentado Audi a lo largo de su historia, el RS e-tron GT ocupa un lugar muy importante. Este gran turismo no sólo se presenta como el modelo más avanzado de la firma alemana, sino también como una declaración de intenciones hacia el futuro y el punto de convergencia entre tecnología, comodidad y desempeño.
El Audi RS e-tron GT es un primo muy cercano del Porsche Taycan, tan cercano que prácticamente son el mismo auto, sazonado al estilo de cada marca. Mientras el modelo de Stuttgart apuesta por las líneas clásicas de la marca, el RS e-tron GT rompe el molde y se muestra más robusto y futurista. Ambos me fascinan, pero cada uno tiene un encanto particular.
Centrémonos en el protagonista. El Audi RS e-tron GT mide 4.98 metros de largo y a simple vista no pretende disimular sus generosas dimensiones. Hay muchos elementos de diseño que engañan a la vista y nos hacen pensar que estamos ante un enorme coupé, como lo largo del cofre, lo definido de la cintura y la manera en que el techo se desvanece desde el poste B. Pero no, no es un coupé. Es un modelo de cinco puertas listo para la acción.
Desempeño que acelera el ritmo cardiaco
Que hasta este momento no haya usado ni una sola vez la palabra "eléctrico", habla de lo impresionante que es este auto. Su carta de presentación no está tanto en su sistema de propulsión eléctrico, sino en lo que hace con él; antes de hablar de un auto de cero emisiones, hablamos de un deportivo con un desempeño descomunal.
Repasemos rápidamente sus números. Sus motores eléctricos desarrollan un total de 646 hp y un impresionante par de 612 lb-pie, repartidos entre ambos ejes mediante una transmisión automática de dos cambios, desarrollada para exprimir el máximo desempeño o mejorar la eficiencia, según la marcha seleccionada.
Aun con un peso de 2,347 kg en báscula, el RS e-tron GT es una bala. Salir acelerando de 0 a 100 km/h con la función launch control emociona tanto como subirse a una montaña rusa. Y no lo digo de manera metafórica. El súbito arranque te pega al asiento y te revuelve todo por dentro, como pocos autos pueden hacerlo. Llegar a 100 km/h le toma 3.3 segundos... según cifras oficiales, pero hubo colegas que rebajaron ese tiempo a menos de 3 segundos.
La magia de los ingenieros de Audi Sport no sólo se refleja en lo emocionante de la aceleración, sino también en una brillante dinámica al momento de llevarlo a pista. El centro de gravedad tan bajo, cortesía de las enormes baterías, ayuda a que las más de dos toneladas a bordo no jueguen en contra al momento de pasar por curvas.
El RS e-tron GT se mueve como si fuese sobre rieles. Sé que suena a cliché, pero no hay mejor forma de explicar lo bien que se agarra al asfalto y lo comunicativo que resulta por la poca inclinación de la carrocería y el magnífico tacto de la dirección. Siendo sinceros, cualquier auto eléctrico podría ser así de rápido, pero pocos igualan su comportamiento en pista.
De manera opcional, Audi ofrece distintos sistemas para elevar aún más la dinámica de este vehículo. Se puede configurar, por ejemplo, con un sistema de dirección en las cuatro ruedas, que gira levemente las llantas traseras para optimizar el paso por curva a altas velocidades, o bien, mejorar el radio de giro cuando se circula lento. También está la opción a frenos carbonocerámicos.
Un GT apto para las calles
En pista es una bestia, pero su perfil polifacético lo vuelve un auto fácil de disfrutar en el día a día. En primer lugar, el RS e-tron GT incluye de serie una suspensión de amortiguación variable, que ajusta su suavidad o rigidez al modo de manejo seleccionado. Así se puede tener un auto configurado para circuito o adaptado a las calles.
En segundo lugar, el equipamiento. De serie incluye una enorme cantidad de amenidades y tecnología para facilitar la vida diaria. Encontraremos, por ejemplo, climatización automática de tres zonas, sistema de sonido Bang & Olufsen de 16 bocinas, freno autónomo de emergencia, asistente de mantenimiento de carril, cuadro de instrumentos digital, espejos retrovisores antideslumbrantes, faros Matrix LED de láser, servicios en línea y muchísimo más.
Por último, la autonomía. En condiciones de uso cotidiano, Audi promete una autonomía de 472 km por carga, gracias a un enorme paquete de baterías con capacidad de 93 kWh y garantía de 8 años o 160,000 km, lo que ocurra primero. El sistema de carga soporta corriente directa de hasta 270 kW, en cuyo caso tomaría sólo 5 minutos recuperar 100 km de autonomía.
El Audi RS e-tron GT representa la máxima capacidad —hasta ahora— de la firma alemana de combinar un altísimo desempeño dinámico con las características de un vehículo eléctrico, todo envuelto en diseño, conectividad y confort. Desde luego hay un precio a pagar, y el RS e-tron GT se da a desear en México por 3,259,900 pesos, antes de cualquier equipamiento opcional.
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La noticia Audi RS e-tron GT, al volante de un deportivo que emociona como montaña rusa fue publicada originalmente en Motorpasión México por Gerardo García .
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